El artista Arthur Szyk (1894-1951) adquirió reputación internacional durante su vida por sus ilustraciones e iluminaciones bien detalladas de temas judíos. Szyk era un habilidoso caricaturista y un apasionado defensor de causas políticas. Desde su infancia en la ciudad polaca de Lodz hasta su muerte en New Canaan, Connecticut, se inspiró en la historia de su pueblo. Szyk encontraba fuerza en historias bíblicas de valentía y martirio judío y en ejemplos más modernos de coraje.

Durante la Segunda Guerra Mundial, Szyk (se pronuncia “Shick”) dedicó sus energías a derrotar a la Alemania nazi y sus aliados, y a hacer que el mundo viera el asesinato en masa de los judíos de Europa. Sus historietas y caricaturas incisivas en tiempos de guerra llenaron las páginas de periódicos y revistas estadounidenses y le hicieron la fama de “ejército de un solo hombre” en la causa aliada. Sus conmovedoras representaciones del sufrimiento y el heroísmo judíos sugerían un activismo político que exigía “acción, no lástima”. En 1943, Arthur Szyk se había convertido en, quizás, el principal defensor artístico del rescate de los judíos de la Europa nazi en Estados Unidos. Sus imágenes aparecían en destacadas revistas y periódicos, tales como Collier's, Esquire, Time, Look, Liberty, New York Post y Chicago Sun. Durante los períodos más oscuros de la guerra, las imágenes de Szyk llegaron a millones de estadounidenses y ayudaron a estimular la moral al desenmascarar la amenaza que el nazismo representaba para la civilización occidental.