
¿Cómo contribuyó el elemento fundamental compartido de la eugenesia al aumento del racismo en Europa y Estados Unidos?
El significado de “raza” y “racismo” ha variado con el tiempo y el ambiente político, social y cultural. Algunos de los sucesos en los que se apoyó el racismo a principios del siglo XX eran compartidos en los países de todo el mundo occidental. Esta pregunta de debate se enfoca en la historia del antisemitismo racial en Alemania y su relación con el racismo en Estados Unidos. Conozca más sobre el elemento fundamental compartido de la eugenesia.
Historia
El racismo tuvo profundas raíces históricas en la Alemania nazi y en Estados Unidos durante el mismo período. La hostilidad contra los judíos y las personas de color se había justificado desde hacía mucho tiempo por diversos motivos. Entre estas razones se incluían los prejuicios religiosos y las ideas económicas vinculadas con la esclavitud y el colonialismo. Lo que fue nuevo a principios del siglo XX fue recurrir a la ciencia o a ideas que sonaban científicas para racionalizar el racismo y las nuevas formas raciales de antisemitismo. Por ejemplo, el movimiento de la eugenesia fue influyente en esta época. Algunas de las falsas ideas “científicas” respecto a la raza incluían las siguientes creencias:
- La población humana puede dividirse en grupos biológicos distintos llamados “razas”.
- Estas “razas” pueden clasificarse en una jerarquía.
Esta fue una era de “racismo científico”. Algunos de los científicos e intelectuales más destacados legitimaron estas ideas. En la actualidad, los científicos han rechazado de forma abrumadora estas creencias.
En su punto álgido, el “racismo científico” reflejó y justificó el imperialismo. El imperialismo era el impulso de muchos países occidentales para expandir su economía y poderío reclamando colonias y territorios por todo el mundo. Para legitimar estos esfuerzos, los líderes y muchos ciudadanos de las potencias imperialistas promovían teorías de superioridad y “supremacía blanca” sobre las personas de color, como los asiáticos y los africanos, que vivían bajo dominio colonial. Alemania y Estados Unidos estaban entre los países imperialistas.
Los defensores de la supremacía blanca se basaban en ideas conocidas como “darwinismo social”. Para favorecer sus creencias, adaptaron conceptos que Charles Darwin y otros científicos aplicaron a plantas y animales. La “sobrevivencia del más apto” sirvió para justificar numerosas creencias racistas. Se aplicó al imperialismo, al capitalismo totalmente desregulado (“laissez-faire”), al racismo y a la pseudociencia de la eugenesia.
La eugenesia surgió por primera vez en Gran Bretaña a finales del siglo XIX. Sus defensores promovían un índice de natalidad más alto entre la gente blanca de “buena” cepa. También trataban de limitar la reproducción de las personas consideradas hereditariamente “defectuosas” o “inferiores”. En Europa y en Estados Unidos, los eugenistas abogaron por la esterilización forzada de los “inadecuados”. Consideraban “inadecuadas” a las personas que tenían enfermedades o discapacidades que se consideraban hereditarias.
Estados Unidos
Los eugenistas influyeron en muchas áreas de la sociedad estadounidense. En algunos estados se aprobaron leyes de esterilización. Los eugenistas también apoyaban las restricciones de inmigración. Por ejemplo, las cuotas por país sirvieron para reducir la cantidad de inmigrantes católicos y judíos, evitar la entrada de asiáticos e impedir que los trabajadores migratorios mexicanos se convirtieran en ciudadanos estadounidenses. El objetivo de las cuotas era asegurar que Estados Unidos siguiera siendo una sociedad mayoritariamente blanca, anglosajona y protestante. Los segregacionistas raciales también recurrieron a la eugenesia para justificar la discriminación contra los afroamericanos y otras personas de color. Por ejemplo, justificaron la prohibición del matrimonio “racialmente mixto” con afirmaciones eugenésicas. Alegaban que esos matrimonios producirían una descendencia biológicamente inferior.
Alemania
En la década de 1920, Alemania estaba dirigida por un gobierno democrático. Las propuestas nacionales para esterilizar por motivos eugenésicos obtuvieron muy poco apoyo político. Los católicos se negaron a interferir en la reproducción humana, mientras que los liberales condenaron abiertamente la violación de los derechos individuales. No obstante, los nacionalistas extremistas promovían la superioridad de la raza “nórdica”. Advertían de los peligros biológicos de “mezclar” las razas europeas con “razas” y “subrazas” no europeas. Algunos científicos clasificaban a los judíos como una “subraza”.
El Partido Nazi, que se formó en 1920, tenía una ideología basada en estas ideas racistas, imperialistas y eugenésicas. Utilizaron la “ciencia” para justificar las creencias nazis arraigadas en el darwinismo social más extremista.
El racismo y el antisemitismo perduran
El racismo y el antisemitismo perduran en Estados Unidos, Europa y otros lugares, a pesar del hecho de que la ciencia moderna ha rechazado por completo las nociones de “razas” distintas y determinadas biológicamente que prevalecieron en el siglo XX.
Después de la Segunda Guerra Mundial y del Holocausto, la eugenesia se desacreditó por varias razones, debido en parte al genocidio y otros crímenes cometidos en nombre de la ideología racial nazi. Otra razón del descrédito de la eugenesia fue el avance de los conocimientos científicos sobre la genética humana. Las investigaciones han demostrado que no existen acervos genéticos distintos que sirvan de marcadores de las “razas”. En todos los seres humanos, el ADN es aproximadamente 99.9% igual. Además, las investigaciones han demostrado que todas las poblaciones humanas pueden rastrear sus raíces genéticas a un origen común en el este de África.
En la actualidad, el consenso entre los científicos es que la “raza” no es un concepto genético ni biológico. Más bien, el concepto de “raza” es cultural y social, y ha variado con el tiempo, el lugar y las circunstancias. Es un invento humano.
A lo largo de la historia, han perdurado los odios dirigidos contra determinados grupos, aunque en ocasiones haya cambiado la justificación. Sin embargo, sin importar esa justificación, atacar a las personas debido al color de su piel, religión, origen étnico o nacionalidad sigue causando discriminación, persecución y actos de violencia que incluyen atrocidades masivas y genocidio.
Preguntas de Pensamiento Crítico
Investigue las leyes y las prácticas raciales de Alemania y Estados Unidos en las décadas de 1920 y 1930. ¿Qué papel desempeñó la eugenesia en esas políticas?
A pesar de la abrumadora información científica en su contra, muchas personas siguen creyendo en la superioridad de ciertas razas. ¿Por qué se aferran ciertas personas a una creencia que ha sido desacreditada?
¿Cómo puede identificarse y contrarrestarse la propaganda y la difusión de desinformación nociva sobre un grupo en particular?