Deportaciones al Gueto de Varsovia

Entre enero y marzo de 1941, los judíos de las comunidades más pequeñas ubicadas hacia el oeste de Varsovia fueron deportados al gueto de Varsovia. Entre abril y julio de 1942, también fueron deportados allí los judíos de los pueblos cercanos al este de Varsovia, de Alemania y de las áreas del oeste de Polonia ocupadas por los alemanes. Al gueto de Varsovia llegaron además cientos de romaníes (gitanos) deportados por los alemanes.

La población total del gueto de Varsovia llegó a superar las 400.000 personas. Las condiciones miserables del gueto, deliberadamente exacerbadas por las políticas alemanas, empeoraron con el tiempo. En 1941, un año antes de las deportaciones masivas, murieron más de 43.000 personas, más del 10 % de la población total del gueto.

Deportaciones desde el Gueto de Varsovia

Entre julio y septiembre de 1942, las unidades de las SS y de la policía alemana, apoyadas por auxiliares que no eran alemanes, deportaron a aproximadamente 300.000 judíos desde el gueto de Varsovia hacia el campo de exterminio de Treblinka II. El personal de la SS y de la policía alemana recurrió a la violencia para forzar a los judíos a marchar desde sus hogares o lugares de trabajo al Umschlagplatz (punto de transferencia), y los obligó a abordar vagones de carga con destino a Malkinia, sobre la línea férrea Varsovia-Bialystok. Cuando los trenes llegaban a Malkinia, eran desviados hacia Treblinka por medio de una línea privada del ferrocarril.

Los alemanes exigían que los miembros del consejo judío (Judenrat) colaboraran en la organización de las deportaciones. El jefe del consejo judío de Varsovia, Adam Czerniakow, se negó a cooperar. Aunque Czerniakow no convocó a los alemanes a la resistencia, se negó a transmitir la orden de deportación y el 23 de julio de 1942 se suicidó ingiriendo una cápsula de cianuro.

Generalmente, los alemanes y sus auxiliares arrestaban a los judíos acordonando una cuadra de la ciudad y obligaban sistemáticamente a los residentes a salir a la calle. Luego forzaban a los judíos a marchar al Umschlagplatz con un gran control de los guardias. En cuanto se desocupaba una cuadra, las unidades de las SS y de la policía alemana con sus auxiliares tomaban la cuadra siguiente y repetían el procedimiento. El personal de las SS y de la policía alemana golpeaba y torturaba brutalmente a los judíos para que se movieran más rápido, y fusilaba a aquellos que no podían o no querían moverse. Para tentar a los judíos a que salieran de sus escondites, las autoridades alemanas a menudo anunciaban que las deportaciones habían terminado y que aquellos que no habían sido deportados recibirían alimento. Famélicos e ignorando que serían transportados hacia la muerte, algunos judíos se presentaban y también ellos eran deportados a Treblinka. Hacia el final de las deportaciones, las fuerzas alemanas y sus colaboradores registraban sistemáticamente las casas y lugares de trabajo, ya vacíos, con el fin de encontrar judíos escondidos.

En septiembre de 1942, 70.000 judíos permanecían en el gueto. En enero de 1943, las unidades de las SS y de la policía alemana deportaron a Treblinka a aproximadamente 6.500 judíos residentes del gueto de Varsovia. Durante los tres días que duró esta operación, 1.171 judíos residentes del gueto fueron fusilados y asesinados.

Entre el 19 de abril y el 16 de mayo de 1943, el gueto de Varsovia fue desmantelado por las fuerzas de las SS y de la policía alemana, apoyadas por un batallón de guardias policiales auxiliares específicamente capacitados del campo de entrenamiento Trawniki. Cuando los pobladores judíos resistieron los primeros esfuerzos de deportación (lo que luego se conoció como el levantamiento del gueto de Varsovia), las SS y la policía fueron tomadas por sorpresa y sufrieron decenas de bajas. Los alemanes luego destruyeron el gueto cuadra por cuadra para quebrantar la resistencia. Durante la operación, fueron asesinados más de 7.000 judíos, la mayoría de ellos combatientes de la resistencia o personas escondidas en el gueto. En su mayoría, fueron fusilados durante el combate con las SS y la policía alemana. Los alemanes deportaron a aproximadamente 7.000 judíos más a Treblinka, y alrededor de 42.000 a los campos de concentración y campos de trabajos forzados del distrito de Lublin del Generalgouvernement. De este grupo, aproximadamente 18.000 judíos fueron enviados al campo de Majdanek, alrededor de 16.000 al campo de trabajos forzados de Poniatowa y unos de 6.000 al campo de trabajos forzados de Trawniki. Los 2.000 restantes fueron dispersados entre los campos de trabajos forzados más pequeños, tales como Budzyan y Krasnik.

Luego de la destrucción del gueto de Varsovia, las autoridades de las SS establecieron allí un campo de concentración pequeño.