Los nazis usaban el término “solución final” para referirse al plan de aniquilar a los judíos. En conjunto, la "solución final” incitaba al asesinato de todos los judíos europeos mediante el uso de gas y el fusilamiento, entre otros métodos. Aproximadamente seis millones de hombres, mujeres y niños judíos fueron asesinados durante el Holocausto, es decir, dos tercios de los judíos que vivían en Europa antes de la Segunda Guerra Mundial. El genocidio o la destrucción en masa de los judíos fue la culminación de una década de medidas discriminatorias cada vez más graves. Después de la invasión alemana a Polonia de septiembre de 1939 (el comienzo de la Segunda Guerra Mundial), la política antisemita nazi se intensificó al punto de encarcelar y finalmente asesinar a los judíos europeos. Después de la invasión alemana de la Unión Soviética en junio de 1941, las SS y las unidades de la policía (funcionando como equipos móviles de matanza) iniciaron operaciones de fusilamiento masivo dirigidas a comunidades judías enteras. En el otoño de 1941, las SS y la policía comenzaron a utilizar camiones móviles de gas con tubos de escape modificados para bombear el gas letal monóxido de carbono que ingresaba a recintos herméticos y así mataba a las personas allí encerradas.

La policía y las SS alemanas asesinaron a casi 2.700.000 judíos en los centros de exterminio, ya sea por asfixia con gas de guerra o por fusilamiento. En la Polonia bajo ocupación, se crearon tres centros de exterminio con el exclusivo propósito del asesinato masivo: Belzec, Sobibor y Treblinka. Otros campos nazis también fueron escenario de los asesinatos en masa que eran parte de la “solución final”. El campo de Majdanek tenía cámaras de gas, en las cuales las SS asesinaron a decenas de miles de judíos, principalmente a quienes realizaban trabajos forzados y estaban demasiado débiles como para trabajar. Las SS y la policía mataron al menos a 152.000 personas, principalmente judíos, pero también a algunos miles de romaníes (gitanos), en camiones de gas en el centro de exterminio de Chelmno. Las autoridades de las SS asesinaron a aproximadamente un millón de judíos de varios países europeos en Auschwitz II (Auschwitz Birkenau).